Fe en el pueblo español
- Vicente Torres
- hace 2 horas
- 2 Min. de lectura
Por supuesto que el pueblo español tiene defectos, como todos los pueblos, pero también tiene virtudes de las que otros carecen, aunque no parece consciente de ellas. Claro que muchos de los que se arruinaron con Zapatero han vuelto a votar al PSOE, pero también han ocurrido cosas singulares en Alemania, Estados Unidos, Francia, Reino Unido…
Antes de Zapatero teníamos unos derechos y unas prerrogativas que hemos perdido para siempre. El cobarde Rajoy parecía que encarrilaba ligeramente la economía, cuando una traición en masa lo desalojó del poder, que fue ocupado enseguida por un golfo de marca mayor. Toda la tenue recuperación de Rajoy se fue al garete y ahora estamos en mucha peor situación que la que dejó Zapatero.
La fuerza de España es espiritual, la que permitió que Felipe II dijera que en sus dominios no se ponía el sol. Las demás naciones llevaban tiempo intentando apagar esa euforia y llegó el momento en que lo consiguieron, porque mantener la excelencia durante mucho tiempo es difícil, aparte de que mientras las demás naciones avanzadas se esmeraban en la técnica, los españoles permanecían anclados en la espiritualidad. Quizá para bien, eso nunca se sabe.
En España hay costumbre de obedecer, por razones obvias, miedo a las represalias de los poderosos, pocos hábitos democráticos, y las heridas de una guerra civil que siempre andan excitando quienes la provocaron y la perdieron. Pero eso no significa que el pueblo español sea borrego. La mayoría de los españoles desea ardientemente que caiga el gobierno, pero la Constitución está llena de trampas, que ya se ve que fueron puestas conscientemente y que ningún gobernante de derechas ha sabido ver hasta el momento. La justicia no es independiente, tampoco lo es el Fiscal General, los sindicatos viven de las subvenciones que les da el gobierno, no existe la cadena perpetua, no hay modo de echar a Sánchez, etcétera. Pero no podrá con España, caerá de bruces.
Comments